
En 2010 inicié la aventura de crear una asociación profesional de coaching, siendo una de las primeras sin ánimo de lucro en España.
Lo más importante fue que no viajaba sola. Me acompañaban varios colegas de profesión tan ilusionados como yo con las grandes oportunidades que se nos abrían. En segundo lugar, nuestro objetivo es y ha sido apoyarnos para crecer.
Al comienzo, apenas se conocía la profesión y parte del trabajo consistía en explicar “qué es el coaching”. Por esta razón, hoy, once años después, nos toca celebrar y también agradecer.
Desde la asociación nos hemos hecho varias preguntas para revisar el camino andado. ¿Qué te ha supuesto pertenecer a la asociación?. ¿Qué te ha aportado?. ¿Qué de diferente hay en tu vida o qué no hubiera pasado si no existiera la asociación de coaching?
En este tiempo, mi crecimiento personal y profesional ha sido notable. Una reflexión que me ha permitido darme cuenta de que he vivido situaciones importantes. He conocido a personas ampliando mi círculo profesional y personal gracias a la existencia de AraCoach y sus socios.
Reconocer este pensamiento me ha llenado de alegría y gratitud, porque en aquel junio de 2010 no alcanzaba a imaginar que iba a recibir tanto 11 años después.
Como resultado, aquí tienes las 5 cosas que me ha sucedido gracias a la asociación de coaching:
1. Aprender que somos colegas, no competencia
El coaching es una profesión solitaria que se llega más lejos en buena compañía. Ha sido muy importante tener el apoyo de otros coach y aprender de sus experiencias en un contexto de confianza y no juicio. Relacionándonos desde maneras diferentes de entender la profesión y la vida.
Además, creo que ojalá hubiese tantos coach como abogados o arquitectos. Sería estupendo para la sociedad que más personas eligieran crecer y cambiar lo que no les funciona. Y ojalá también en todas las profesiones se vienen a sí mismos como colegas.
2. No tirar la toalla
Nacimos en 2010 en plena crisis, y resistimos, y ahora en la pandemia nos hemos hecho más fuertes todavía gracias al poso que llevamos como profesionales.
Si no hubiese existido esta asociación de coaching, es probable que hubiese abandonado varias veces este camino. Gracias compañeros por ser viento soplando bajo las alas justo cuando más ha hecho falta para ser quién ahora soy.
3. Trabajar en lo que me gusta
Trabajando y creyendo profundamente en que esta es la mejor profesión del mundo. Ante todo soy coach, también soy periodista, gestora de proyectos, emprendedora y, dentro de un año, también psicóloga.
De hecho, una de las claves es que nos movemos desde la profesionalidad, la rigurosidad, la ética y la formación continua. Como resultado, entendemos el coaching como una herramienta poderosa para aplicar junto con nuestra trayectoria profesional anterior.
4. Conseguir el primer seguro para coach de España
Probablemente el más económico. Fue tan potente poder contar con esa seguridad haciendo nuestra profesión, que decidimos abrirlo a todos los coach de España.
Cada vez son más los que se acercan y agradecen desde todos los puntos del país que ofrezcamos el seguro de responsabilidad civil. Incluso de Europa, pues cubre también el territorio Europeo (excepto Reino Unido).
5. Conocer a mi pareja
Hace varios años coincidí en un evento que organizamos desde la asociación de coaching con un hombre estupendo. Fue flechazo fulminante, y soy muy afortunada de poder aprender juntos y, sobre todo, compartir a su lado esta pasión que nos une.
Hay hombres maravillosos en el mundo y parece que AraCoach me regaló a uno de ellos.